Aunque la fimosis no es una patología grave, en ocasiones puede provocar importantes molestias y requerir tratamiento.
En este artículo te cuento todo lo que necesitas saber sobre la fimosis: qué es la fimosis, cuales son sus causas, qué síntomas provoca, cómo es el tratamiento y cuando se recomienda tratarla tanto en adultos como en niños, qué complicaciones pueden aparecer si no se trata o como consecuencia de la cirugía.
Contenido
- 1 ¿Qué es la fimosis?
- 2 Tipos de fimosis. Clasificación
- 3 Causas de fimosis
- 4 Grados de fimosis
- 5 Fimosis en niños
- 6 Fimosis en adultos
- 7 Síntomas de fimosis
- 8 ¿Cómo se diagnostica la fimosis?
- 9 ¿Cuando es necesario tratar la fimosis?
- 10 Complicaciones si no se trata
- 11 Cómo prevenir la fimosis
- 12 Normas básicas de higiene en la fimosis
- 13 Tratamiento de la fimosis
- 14 ¿Duele la fimosis?
- 15 ¿Duele la cirugía?
- 16 Tipo anestesia para la cirugía de fimosis
- 17 ¿Cómo es el postoperatorio de la fimosis?
- 18 Consejos para el cuidado postoperatorio tras una operación de fimosis
- 19 Alternativas de tratamiento
- 20 Fimosis no es lo mismo que «parafimosis»
¿Qué es la fimosis?
Definimos fimosis como la imposibilidad de retraer de la piel del prepucio hasta el surco balanoprepucial, es decir, por debajo del glande, que impide la normal exposición de este.
En la siguiente imagen puedes ver la anatomía del pene y el proceso de retracción del prepucio:

Tipos de fimosis. Clasificación
De forma práctica, clasificamos la fimosis en 2 tipos:
- Fimosis primaria o congénita: es la fimosis que aparece desde el nacimiento y que suele resolverse de forma espontánea sin mayor complicación. Casi nunca precisa tratamiento.
- Fimosis secundaria, adquirida o patológica: hace referencia a la fimosis que aparece como consecuencia de alguna de los problemas que comentaremos a continuación. Cuando provoca molestias sí requiere tratamiento.
Causas de fimosis
En esta sección dejaré de lado la fimosis fisiológica o congénita y repasaré las causas de fimosis patológica.
Para dejarlo claro, la fimosis patológica es la que aparece como consecuencia de algún problema que afecta a la piel redundante que cubre el glande (prepucio).
Causas más frecuentes de fimosis patológica
- Prepucio estrecho: se debe a una desproporción entre el tamaño glande y el de la piel del prepucio que lo cubre. Suele presentarse en edad infantil y en adolescentes.
- Adherencias entre el prepucio y glande: esta situación suele aparecer como consecuencia de la falta de higiene asociada a la falta de retracción del prepucio en edad pediátrica. Se crean, entones, unos «puentes o adherencias» en la parte interna de la mucosa del prepucio que requieren atención urológica preferente.
- Frenillo corto: esta situación se da cuando el pliegue elástico de tejido que une la parte inferior del glande con la parte interna del prepucio (llamado frenillo) es demasiado corto y dificulta la retracción de la piel o molesta al tener relaciones sexuales.
- Balanitis o postitis: significa inflamación del glande o de la piel del prepucio que lo recubre. Aparece típicamente en pacientes diabéticos de edades avanzadas por las implicaciones dérmicas que tiene esta enfermedad en la vascularización de los tejidos y la posibilidad de infección asociada.
- Liquenificación de la piel: el liquen escleroatrofico (también denominado balanitis xerotica obliterans) es cuando se produce una inflamación de la piel del pene con un típico emblanquecimiento de la misma asociado a un déficit de elasticidad que puede producir dolor o imposibilidad de retraer la piel. Suele producirse en edades avanzadas.
Grados de fimosis
A nivel teórico, podemos clasificar la fimosis en 5 grados de gravedad según la capacidad de retracción de la piel siendo el grado 1 la imposibilidad total de retraer la piel y exponer el glande y el grado 5, la más leve, que permite exponer el glande por completo de forma sencilla.
- Fimosis grado 1: Sin retracción posible
- Fimosis grado 2: Mínima retracción, exposición solo del meato uretral (orificio por el que sale la orina)
- Fimosis grado 3: Exposición de la mitad del glande
- Fimosis grado 4: Exposición del glande por encima del surco coronario
- Fimosis grado 5: Exposición completa del glande
Cabe destacar que esta clasificación se utiliza para describir el problema pero a penas tiene utilidad práctica dado que no nos sirve decidir sobre la necesidad de tratamiento.
En la práctica clínica, cualquier dificultad para retraer la piel prepucial que implique una molestia debe ser evaluada por un urólogo para valorar la necesidad de tratamiento.
Por contra, algunas fimosis con gran dificultad para la retracción del prepucio pueden no acarrear ningún problema y por tanto no necesitar tratamiento.
Fimosis en niños
Prácticamente el 100% de los recién nacidos presentan fimosis fisiológica.
Se trata de una fimosis que aparece sobre piel sana y que simplemente se debe a la piel redundante que cubre el glande y que todos tenemos de forma natural a no ser que nos hayan realizado una circuncisión.
Salvo excepciones, desaparece de forma espontánea en los en los primeros años de vida y no requiere tratamiento más allá de unas normas de higiene básicas.
¿Hasta que edad es normal la fimosis en niños?
La fimosis fisiológica se considera normal hasta los 3-4 años de edad. En este periodo se estima que desaparece en más de un 90% de los casos.
Tratamiento de la fimosis en edad pediátrica
El tratamiento de la fimosis en niños es muy sencillo. En la gran mayoría de casos simplemente es necesario mantener una adecuada higiene de la zona con agua y jabón y retraer el prepucio de forma periódica sin forzar la piel.
Sólo en algunos casos más acusados y siempre bajo la supervisión de un pediatra o un urólogo, se aconseja el uso de pomadas de corticoides tópicos para ayudar a la retracción de la piel.
Sólo en ocasiones, si la fimosis provoca complicaciones como infecciones de la piel o infecciones de orina, también puede ser necesario el tratamiento quirúrgico.
¿La fimosis puede ser hereditaria?
La fimosis no es directamente hereditaria (que se hereda de los padres) aunque como ya hemos comentado, sí puede ser congénita (que se nace con ella, independientemente de que el padre la padezca o no).
Fimosis en adultos
Aunque la fimosis es un problema que solemos asociar a niños o adolescentes, también es muy frecuente en la edad adulta debido a los siguientes factores:
Primero el desarrollo de los genitales puede cursar con una desproporción de crecimiento entre el glande y la piel del prepucio.
Segundo, existen diversas enfermedades de la piel tales como la balanitis xerótica o incluso afectación cutánea debida a la diabetes que se dan sólo en adultos.
Y tercero, algunas de las causas de fimosis en adultos aparecen en derivadas de las relaciones sexuales o de enfermedades de transmisión sexual.
Síntomas de fimosis
Obviamente, el principal síntoma de la fimosis es la imposibilidad de retraer la piel del prepucio. Pero además pueden aparecer síntomas derivados de la fimosis como:
- Infección: tanto de la piel como del glande (balanitis).
- Dolor a nivel del frenillo (frenillo corto) y al retraer la piel.
- Problemas de limpieza y mal olor: al no poder retraer la piel se puede acumular suciedad entre el glande y la piel.
- Lesiones dérmicas: a veces se producen pequeñas heridas en la piel prepucial, si ésta es poco laxa al retraerla, así como fisuras o grietas en la piel.
- Infecciones urinarias: situación con la que debemos llevar especial precaución en niños pequeños.
- Dificultad para tener relaciones sexuales.
- Cáncer de pene: la fimosis y la inflamación crónica de la piel (balanitis xerótica) constituyen uno de los factores de riesgo del cáncer de pene.
¿Cómo se diagnostica la fimosis?
El diagnóstico de fimosis «patológica» es siempre clínico. No se necesita ningún tipo de prueba complementaria sino que todo el diagnóstico se basa en una simple exploración física.
¿Cuando es necesario tratar la fimosis?
Es necesario tratar la fimosis cuando aparecen complicaciones como infecciones, problemas de higiene, dolor o dificultades para mantener relaciones sexuales.
Complicaciones si no se trata
A corto plazo, las únicas complicaciones que pueden aparecer son los propios síntomas que hemos comentado anteriormente, pero no hay ninguna complicación adicional derivada de no hacer un tratamiento precoz.
Sin embargo, a largo plazo, una fimosis no tratada dificulta la higiene de la zona lo que puede provocar una balanitis xerótica crónica que supone un aumento del riesgo de sufrir cáncer de pene. Eso sí, hay que destacar que se trata de un problema muy poco frecuente.
Cómo prevenir la fimosis
La única medida que podemos llevar a cabo para prevenir la fimosis es acostumbrarnos desde pequeños a retraer la piel del pene siempre que orinamos o que nos duchamos. De esta forma la piel del prepucio se vuelve más elástica y puede retraerse con facilidad.
Normas básicas de higiene en la fimosis
Si padeces fimosis ya sabrás que la higiene de la zona del glande puede ser algo más complicada dado que este queda parcialmente cubierto.
Aun así, la higiene es sencilla y no requiere ninguna medida especial.
Bastará con intentar retraer la piel para limpiar la zona con agua y jabón y, tras orinar, limpiarse con papel higiénico, toallitas higiénicas o en la ducha.
Tratamiento de la fimosis
Posiblemente hayas oído o leído muchas cosas acerca del tratamiento de la fimosis. Algunas son ciertas pero otras distan mucho de la realidad o directamente son engaños comerciales que no se adecuan a los estándares quirúrgicos actuales y que simplemente buscan «venderte una cirugía».
Vamos a ver una por una todas las posibilidades de tratamiento disponibles para tratar la fimosis empezando por esos «engaños comerciales».
Cirugía sin bisturí para tratar la fimosis
Expresiones como cirugía sin bisturí o cirugía láser de fimosis son simples reclamos comerciales que no tienen el mínimo rigor científico ni se acercan a la realidad de la práctica quirúrgica actual.
El tratamiento quirúrgico de la fimosis, es la circuncisión o postectomía y para realizarla, siempre es necesario el bisturí o algún otro elemento quirúrgico que corte. Quizá en lugar de un bisturí podemos utilizar unas tijeras pero en cualquier caso siempre necesitamos algún elemento cortante.
Cirugía láser de la fimosis
De la misma forma que sucede con la «cirugía sin bisturí», el láser se utiliza para muchos procedimientos quirúrgicos en urología pero en ningún caso para la circuncisión.
No aporta ninguna ventaja respecto a la cirugía convencional ya que por suerte es una técnica estandarizada, segura y eficaz que llevamos practicando desde hace muchos años.
Y ahora, la realidad…
Como norma general disponemos de 2 tipos de tratamiento para corregir la fimosis: tratamiento conservador o cirugía. Elegir uno u otro de penderá de varios factores como la edad, el grado de fimosis, la duración de la misma o las patologías de base que pueda tener el paciente.
Vamos a verlos en detalle:
Tratamiento conservador de la fimosis (sin cirugía)
Es el tratamiento que solemos recomendar de entrada para niños.
Como ya he comentado se basa en la retracción manual de la piel prepucial de forma frecuente para liberar poco a poco las posibles adherencias que se hayan formado.
Según el caso, en ocasiones también se puede añadir al tratamiento una pomada de corticoides tópicos, siempre bajo supervisión profesional dado que se deben aplicar durante un tiempo limitado.
Tratamiento quirúrgico de la fimosis
La cirugía para tratar la fimosis es la circuncisión o postectomía.
Es el tratamiento «más definitivo» y el que se recomienda para tratar la mayor parte de casos de fimosis en adultos debida a enfermedades dermatológicas como el liquen escleroatrófico, balanitis con micosis (hongos) asociada, etc.
¿Duele la fimosis?
Habitualmente la fimosis no provoca ningún tipo de dolor.
En todo caso, puede aparecer dolor al intenta forzar la retracción de la piel, algo que puede suceder por ejemplo al tener una erección para poder realizar algún tipo de acto sexual.
¿Duele la cirugía?
La cirugía de circuncisión, lógicamente se realiza bajo anestesia y por tanto no duele, aunque como comentaré más adelante, el postoperatorio sí que puede resultar molesto.
Él único dolor que puedes sufrir es el derivado de las inyecciones para aplicar la anestesia local. Podríamos decir que se parece a cuando vamos al dentista a que nos saque una muela y sufrimos el leve dolor de los pinchazos de la anestesia.
Tipo anestesia para la cirugía de fimosis
Como normal general la circuncisión o postectomía se realiza bajo anestesia local.
Lo que hacemos es aplicar una serie de inyecciones con anestesia en la base del pene, para anestesiar la zona y poder realizar el procedimiento sin dolor.
En caso de pacientes muy aprensivos, niños o pacientes que no quieran notar absolutamente nada, siempre existe la opción de realizar este procedimiento bajo anestesia general aunque no es lo habitual
¿Cómo es el postoperatorio de la fimosis?
El postoperatorio de la circuncisión suele ser inicialmente molesto o incluso ligeramente doloroso «hasta que uno se acostumbra».
Me explico.
El glande es una mucosa sensible que está protegido por la piel del prepucio. Tras la intervención, el glande queda expuesto y en contacto directo con la ropa interior por lo que debe «endurecerse» para acostumbrarse.
Consejos para el cuidado postoperatorio tras una operación de fimosis
Solemos recomendar las siguientes pautas para aliviar el dolor y las molestias tras la cirugía:
- Pene en posición vertical. Es similar a cuando nos operan del pie y nos recomiendan elevarlo para evitar la hinchazón del mismo. Al operar el pene aconsejamos colocar el glande mirando hacia arriba ayudándose de la ropa interior. (ver el siguiente punto).
- Calzoncillos apretados. Son necesarios para ayudar a que el «pene mire hacia arriba» ya que así minimizamos la posibilidad de que aparezca un hematoma.
- Antiinflamatorios. Recomendamos tomar antiinflamatorios de uso habitual durante los primeros días para bajar la inflamación producida por la cirugía y aliviar el dolor.
- Hielo local. El uso de hielo, nunca en contacto directo con la piel, también ayuda a desinflamar la zona y es recomendable durante los 2-3 primeros días.
- Curas diarias con agua y jabón. Se debe aplicar povidona yodada para evitar la infección de la zona y ayudar al proceso de cicatrización.
- Secar la zona con frecuencia. Este punto es sumamente importante. La humedad favorece la aparición de infecciones bacterianos y fúngicas (hongos) por lo que la zona debe permanecer bien seca. Es recomendable utilizar un secador de pelo suave para llegar a zonas de difícil acceso o que pueden estar demasiado sensibles como para secarlas con una toalla.
- Revisión periódica en consulta para seguir la evolución de la herida. En mi caso, siempre cito a los pacientes intervenidos a las 24h tras la cirugía comprobar que la herida evoluciona favorablemente y posteriormente tras unos días o semanas para ver el resultado final tras la caída de los puntos.
Alternativas de tratamiento
No existen otros tratamientos alternativos además de los comentados anteriormente, ni tratamientos de medicina alternativa ni naturales.
Si tienes dudas acerca de la mejor opción de tratamiento para ti, mi consejo es que busques un urólogo que te dé confianza y con el que puedas discutir las ventajas e inconvenientes de cada opción de tratamiento.
Fimosis no es lo mismo que «parafimosis»
Para acabar el artículo, me gustaría dejar clara la diferencia entre estas 2 situaciones que, aunque son casi opuestas, habitualmente se confunden.
Como ya hemos comentado, la fimosis es la imposibilidad de retraer la piel más allá del glande, es decir, la imposibilidad de exponer el glande fuera del prepucio. Una situación que, si bien puede requerir tratamiento, este nunca requiere atención médica urgente.
Por contra, la parafimosis es la imposibilidad de devolver la piel del prepucio, una vez retraída por detrás del glande, a su posición normal. A diferencia de la fimosis, se trata de un problema agudo que requiere atención médica urgente dado que provoca un dolor intenso y además puede provocar complicaciones si no se trata de forma precoz.
Gracias por leer hasta aquí. Espero que te haya sido de utilidad.
Si crees que falta algún detalle o tienes alguna duda, déjame un comentario y estaré encantado de actualizar el texto y responderte.
Me gustaría que me tratara usted… Pero hasta el final vi donde se encuentra situado su consultorio… Yo vivo en Estados Unidos… 😒
Buenas Daniel.
Gracias por el comentario. Estaria encantado…pero evidentemente no tengo consulta en EEUU.
Si quieres realizar una consulta online conmigo ante cualquier duda o problema urologico o andrologico que tengas ya sabes que tienes la opcion de hacerlo a traves de la pg web.
Un saludo, muchas gracias
Teniu el web en bon català? No l’he sabut trobar.
Bones Oriol
Si, tenim pagina en català…però la tinc en construccio i menys actualitzada que la de en castellà.
La veritat és que m’agradaria tenir-ho tot mes actualitzat però no tinc temps de tot…com també m’agradaria tenir temps de fer més articles però a tot no arribo.
Et deixo aqui l’enllaç…amb la idea de tenir-ho tot més actualitzat en uns dies.
https://urologiapepauguet.com/cat/
Gràcies pel comentari
Es necesario ir en ayunas? o no.
Buenas Miguel.
Si la cirugia se practica bajo regimen de anestesia local (solo anestesia en el sitio donde se va a practicar la cirugia) como pasa en la mayoria de cirugias de circuncision, vasectomia o cistoscopia entre otras; entonces NO es necesario ir en ayunas.
Un saludo
Hoy hace 15 dias me operaron de fimocis, y mi pregunta es, cuantos días tengo que seguir ( después del lavado) en ponerme BETADINE, que es lo que me aconsejaron, ya que lo hago dos veses al día, es correcto?. gracias por las molestias. P.D. tengo 75 años.
Buenas Miguel
Las curas postoperatorias tras una circuncisión se deben realizar con agua y jabón y betadine durante 10-15 días. A partir de entonces la herida ya está más cicatrizada (más consolidada y seca) y sólo con agua y jabón ya suele ser suficiente.
Por lo que se refiere a los puntos, si son con material reabsorbible rápido (lo más común) suelen caer en 4-6 semanas.
Un saludo.
Buenos días doctor, estuve leyendo su artículo y Quiero comentarle que tengo a mi padre de 74 años y padece de fimosis. Su médico le mandó hacer un tratamiento con Macril y lavarse con agua y borato de sodio por una semana. No funcionó y quiere hacerle una cirugía. El problema es que mi padre es diabetico e hipertenso. Quiero saber si es recomendable la circuncisión en su caso o existe otra solución sin cirugía.
Le escribo desde Buenos Aires, Argentina.
Saludos y muchas gracias.
Buenas Maria
Si con una crema a base de corticoides no ha ido bien, lo mejor es operarse de circuncision.
Es una cirugia sencilla, rapida y muy resolutiva.
Yo no dudaria en plantearmelo.
Un saludo